Les presentamos el Aguardiente Antioqueño Real 24°, una creación audaz de la Fábrica de Licores de Antioquia que marca un punto de inflexión sumamente controvertido en la escena de los destilados nacionales. Este aguardiente suave, con un contenido alcohólico de 24 grados, se presenta en una botella de 750 ml de tonalidad amarilla. Aunque su envase es el mismo del Ron Medellín 19 años, la polémica se desata por su distintivo color amarillo, en sincronía con el verde asociado a la reconocida marca Aguardiente Amarillo de Manzanares y el selecto nicho de mercado que busca conquistar.
Aunque no se han encontrado similitudes evidentes en nombres de marca, a nuestro juicio, existe una semejanza en la identidad del producto, el cual crea confusión al consumidor.
Desde la FLA, destacan que este lanzamiento estratégico responde a su visión de aprovechar el creciente mercado de licores suaves y coloridos. "Nos dedicamos a satisfacer los deseos de los consumidores. Si hay demanda, nosotros estamos ahí", asegura el gerente Hurtado.
No obstante, la Licorera de Caldas está lista para emprender acciones legales ante la Superintendencia de Industria y Comercio, argumentando que la FLA está generando confusión entre los consumidores al imitar su Aguardiente Amarillo de Manzanares, un producto icónico desde 1885.
En medio de esta controversia, cabe destacar que la FLA aprovechó la restricción previa en la venta del aguardiente amarillo de Manzanares en el departamento de Antioquia para consolidar su presencia con la masificación de su controvertida marca Real 24°.
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